domingo, 12 de abril de 2009

¿QUÉ ES UN PROBLEMA?

Es complicado imaginarse una vida sin problemas. Pensar en su ausencia hace que la rutina y la monotonía tomen protagonismo. Los altibajos a los que debemos enfrentarnos día a día, atravesando, saltando y derribando obstáculos que bloquean el camino hacia nuestros objetivos, son muchas veces razón de lucha constante.

problemas

Desde los optimistas hasta los más pesimistas han enfrentado problemas y muchas veces la solución está más lejos de lo que ellos esperan. He ahí el problema: encontrar la solución. Pero ¿cómo enfrentar un problema sin saber qué es un problema? Para muchos es una pregunta obvia y, curiosamente, se llena de respuestas mediocres ante tan ‘obvio’ cuestionamiento.

Básicamente, un problema es la dificultad o el obstáculo para encontrar alguna solución a una situación o hecho determinado. Según la RAE, un problema se define como una “cuestión que se trata de aclarar”; también, como una “proposición o dificultad de solución dudosa”. Sin embargo, para otros autores la definición de la palabra problema es mucho más compleja y terminan por transformar este ejercicio en uno verdadero.

Un problema se puede enfocar desde distintos ángulos, y cada uno tendrá su propia definición. En matemáticas, es una pregunta que requiere una explicación y demostración mediante ejercicios matemáticos; en religión, se refiere a la contradicción entre dos dogmas; en filosofía, a la posibilidad e imposibilidad de las situaciones y cosas.

Según Ronald Kantowski, cosmólogo teórico, un problema desde el punto de vista matemático es “una pregunta que el alumno no sabe responder o una situación que es incapaz de resolver usando los conocimientos que tiene inmediatamente disponibles”.

Desde el ángulo filosófico, para Aristóteles, un problema es “un procedimiento dialéctico que tiende a la elección o al rechazo o también a la verdad y al conocimiento”. Ahora, ninguna de estas definiciones es enteramente clara sin una explicación previa, por lo tanto, es mejor quedarse con las respuestas más simple. Por ejemplo, “un problema es cuando dos más dos no son cuatro”, frase que usaba el fallecido productor de cine, Warren Goldberg, para definir cuando se estaba en presencia de uno.

Se entiende que al enfrentarnos a un problema hay algo que no encaja y hay que hacer que encaje; debemos encontrar los números adecuados para que el ejercicio sume cuatro. Y para esto, es indispensable saber sumar.

Por lo tanto, un problema tiene cierta relación con el conocimiento. Cuando una situación se nos escapa de las manos es, la mayor de las veces, porque no tenemos pleno conocimiento sobre lo que estamos tratando: no se previno lo que podía suceder, no se sabía lo que podía pasar. Asimismo, para encontrar alguna solución, se requerirá llenarse de más conocimientos para resolver el problema. Entonces, es mejor ‘prevenir que curar’, permanecer siempre atentos y bien informados para que ante cualquier síntoma de que se avecina un problema, estemos preparados.

A fin de cuentas, sea como esté definida la palabra, problemas son problemas y lo importante es saber enfrentarlos.

No hay comentarios: