martes, 24 de mayo de 2011

Como un aullido interminable

“Tú no puedes volver atrás
porque la vida ya te empuja
como un aullido interminable”

José Agustín Goytisolo
Palabras para Julia
 

viernes, 6 de mayo de 2011

Una casualidad encubierta

Cuando llegan a nuestros manos libros que nos convocan, que nos abren a la reflexión, que nos entusiasman, que nos invitan a hojear sus páginas una y otra vez como si de pronto nos las fueran a quitar, significa que hemos encontrado, o mejor dicho, que nos ha encontrado el libro adecuado. Los libros no son buenos ni malos, sino que llegan, a veces, en el momento equivocado.

Estaba revisando la pequeña biblioteca de un amigo que estudía psicología y que no veía hace cinco años. Entre medio de obras de metafísica, ensayos psicoanalíticos y de interpretación de los sueños, me encontré con un libro que me llamó la atención de inmediato. "Antología de redactores chilenos", dice el título. Lo saqué de entremedio y lo abrí cuidadosamente porque así me lo advirtieron sus páginas añejas.

Al leer esas primeras líneas me sentí profunda y misteriosamente extraño. "El periodismo es como una pequeña huella en la arena, que se borra con el tiempo disperso, dije alguna vez. Mientras que el escritor o el poeta se prolongan de una u otra manera en libros o antologías, el mejor artículo perodístico nace y se va con la hoja que cae del calendario". Cerré el libro, miré a mi amigo y le dije: "¿Préstame el libro? Necesito leerlo". "Te lo regalo", me respondió.

El libro es una recopilación de escritos de 31 redactores chilenos, la mayoría de ellos periodistas, algunos recordados hasta ahora y otros que aún siendo muy buenos, fueron olvidados. La magia del libro está ahí: en el olvido y la capacidad de revivir las palabras de unas personas que escribieron con pasión y que retrataron una época de la que fueron testigos desde una mirada propia.

Yo admiro a todas esas personas que se atrevieron a escribir, y me satisfago con la idea de que he tenido la suerte de llegar a ellos, por una casualidad que me da la impresión, es más que eso.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Yo soy la nada

Yo soy la inconsecuencia,
la incongruencia más grande,
la mentira revelada,
la estafa más miserable.
Yo no soy nada,
y he creído, a veces, serlo todo,
pero yo no soy nada.